martes, 15 de mayo de 2007

LA TEMPERATURA DE GAIA

(está subiendo...)

Gaia es el nombre griego de la gran Diosa madre de las criaturas, la Tierra. En esta sección queremos hacer conciencia de lo que le estamos haciendo, este grano de arena va a entrar en sus ojos y espera que la comezón que provoque mueva acciones, pensamientos, ideas.

Una de los temas que más nos debe importar, por complejo, por dramático y porque nos involucra a todos, es el temido ECOCIDIO. Antes de hacer una dolorosa pero necesaria introducción al término, que empieza a escucharse y a leerse de manera cotidiana, he aquí un fragmento del bello “Himno a la Tierra”, poesía hindú que se encuentra en uno de los textos más antiguos de esa tradición: el Atharva Veda, o Libro de las Fórmulas Mágicas o Ensalmos:

¡Procreadora universal! ¡Madre de las plantas!
Tierra firme, tierra ancha,
que podamos siempre caminar sobre ella,
benéfica y acogedora.

Para definir el término ecocido hay que pensar en extición en masa de especies. Hay que saber que han sucedido extinciones previas a la que sucede ahora mismo, a diferencia que ahora nosotros como seres humanos la estamos provocando. Uno fácilmente puede dudar de tal cosa y preguntarse ¿cómo puede ser que estemos provocando una extinción en masa de especies? La tecnología y la modernización de nuestras vidas ha hecho a las ciudades más eficientes, sí se talan árboles y se matan animales, eso ha sido siempre. ¿Qué puede ser tan malo?

Lo malo es que desaparecen especies de animales y plantas, se les empieza a decir extintas, y esto significa PARA SIEMPRE. La extinción tiene repercusiones a corto, mediano y largo plazo que no se han podido mesurar en su totalidad, pero los panoramas son siempre desalentadores: escasez de recursos significa más hambre, más sed, más calor, más enfermedades, más pobreza. Tal extinción es de fondo, porque es común, tan común como ir de cacería; es continua (en Brasil, desaparecen cuatro especies por día) y es gradual (va en aumento). Lo peor de todo es que en realidad es catastrófica en todo lo espeluznante que pueda ser esta palabra, porque suceden cambios terribles en los ecosistemas y estos sistemas han sido, son y serán el planeta en general. Esto quiere decir que no solamente pueden acontecer esos terribles desastres naturales que ya hemos visto provocados por las furias de tormentas y huracanes, sino que el ligero equilibrio de la vida, el futuro de la humanidad, está en peligro, en verdad.

Hay que pensarlo, hay que saber que esto se debe a que hemos transformado el ambiente, para mal. Los ciclos biológicos y químicos del planeta han cambiado, el cambio climático, o aumento paulatino de las temperaturas año con año nos sorprende y la erosión de los suelos, son algunas de las cosas que han modificado demasiado, en muy poco tiempo, el rostro del planeta.

Dejemos de pensar que esta carrera tecnológica nos va a llevar a habitar otros planetas o subestaciones en el espacio. Aceptémoslo, hemos enfermado a Gaia, hay que HACER algo.

Siempre hay algo que nos ayuda a pasar el trago amargo, como separar la basura y hacer composta. Estaremos haciendo suelo para el futuro y fomentando un cambio de actitud permanente. Recuerden que no basta con tirar la basura, hay que procurar NO HACERLA.

1 comentario:

pk dijo...

apenas llego. después leo con calma y comento. saludos